lic. maria maldonado

No te enojes por lo que no puedes cambiar en los demás.

Perderás fuerzas y energías buscando un cambio que nunca se sucederá, y en el que te esfuerzas en vano.

Aceptar a las personas tal y como son siempre cuesta, muchas más veces de las que pensamos. Inconscientemente intentamos cambiarlas. 

Generalmente, lo que nos irrita en los otros no son más que fallos en nosotros mismos o bien el esperar que actúen como lo haríamos. 

No podemos cambiar a los demás, ni pretender que otros se transformen en las personas que nosotros queremos, por mucho aprecio que les tengamos y esfuerzo invertido.

Tú puedes cambiar, pero solo si tú quieres. Imagínate que otra persona te dice que cambies, te insta que así no te soporta y tú intentas cambiar. 

Eso va a ser imposible. Tú solo podrás cambiar si te lo propones tú mismo.

Acepta a las personas como son y jamás pienses que cambiar a alguien es la solución

Realmente es una solución fácil e infructuosa que quizás traiga muchas más consecuencias de las que piensas.

 No te arriesgues. Cambia tú, acepta a los demás y sobre todo no te enrosques en batallas imposibles.