Éste es un tipo de ego, en donde las personas que creen que siempre tienen la razón, dan consejos todo el día y,
lo peor de todo, contestan a todo aunque sean ignorantes en ciertos temas, ellos siempre tienen algo para decir,
y hasta ponen en el relato algo de misterio, mucha elocuencia.
Cuando esto aparece, es necesario ver si hay una necesidad imperiosa para contestar siempre a cualquier pregunta u opinar
en una conversación de manera que quedes siempre por encima de los demás. Si es así, hay que aprender a escuchar,
correrse un poco del centro de la escena e incluso aprender de verdad de los demás. Ser consciente que es imposible
que sepamos todas las respuestas y pensar de dónde y para qué está esta necesidad, si en el fondo no hay un conflicto
sobre el no saber, los ignorantes, el no responder; para pensar e incluso tratar con tu terapeuta.