Uno de los principales cambios de mentalidad que tienes que hacer para aprender a sentirte mejor cada día es que dejes atrás
los pensamientos negativos y cultives una visión más positiva de la vida.
Está claro que no hay nada perfecto, pero no tienes que centrar tus energías en todo lo negativo sino, simplemente,
ser consciente de que eso existe, pero no focalizar todo el tiempo en ello tu atención.
Cultivar una visión negativa y pesimista terminará afectando gravemente tu humor y, esto, hará que puedas actuar de forma
egoísta o que respondas mal a las personas de tu alrededor. La negatividad solo atrae más negatividad, por tanto, si quieres
empezar a cambiar tu estado de ánimo, lo primero es que cambies de chip y seas más positivo en tu vida.